Venerable, Devota y Fervorosa Hermandad de
Penitencia de Nuestro Padre
Jesús Cautivo y Rescatado (Vulgo de Medinaceli) y María Santísima de la
Trinidad
Durante los días 4, 5 Y 6
de marzo, nuestra Corporación Nazarena realizó su Solemne Triduo Cuaresmal en
honor a nuestros amados Titulares.
Durante los tres días de
Triduo nos acompañó el Coro Parroquial de San Paulino.
El miércoles 4 de marzo, celebramos el primer día del ejercicio del Triduo, la Eucaristía fue presidida por nuestro Director Espiritual D. José María Quintana Raigadas, Párroco de San Paulino, quien en su homilía nos pedía que utilizáramos la Hermandad como herramienta para acercarnos a Dios, que cada vez que le dábamos de comer al hambriento, o ayudábamos al enfermo lo estábamos haciendo con el propio Jesucristo. Nos pedía que no nos quedásemos en la Imagen de nuestro titular, que a través de ella debemos de llegar Dios.
El miércoles 4 de marzo, celebramos el primer día del ejercicio del Triduo, la Eucaristía fue presidida por nuestro Director Espiritual D. José María Quintana Raigadas, Párroco de San Paulino, quien en su homilía nos pedía que utilizáramos la Hermandad como herramienta para acercarnos a Dios, que cada vez que le dábamos de comer al hambriento, o ayudábamos al enfermo lo estábamos haciendo con el propio Jesucristo. Nos pedía que no nos quedásemos en la Imagen de nuestro titular, que a través de ella debemos de llegar Dios.
El jueves 5 de Marzo, segundo día del ejercicio del Triduo, también realizó la Santa Cátedra el Rvdo. José María Quintana Raigadas.
En ambos ejercicios del
Triduo Cuaresmal, antes de finalizar la Eucaristía, el Padre José María
procedió a incensar Nuestros Sagrados Titulares, mientras se realizaba la
Oración a Nuestro Señor y a Nuestra Señora, ambas oraciones del puño y letra
del Rvdo. Padre D. Antonio Troya.
Como es tradicional, el primer viernes del mes de marzo se realiza nuestra Solemne Función Principal de Instituto, coincidiendo con la clausura del Triduo Cuaresmal.
En este tercer día de Triduo, 6 de Marzo, la Comunión General y la Homilía corrió a cargo del Rvdo. Padre D. Tomas Díaz Artola, párroco de la Iglesia San José, quien entrara custodiado por seis acólitos en procesión desde la puerta principal de la Parroquia San Paulino. La celebración eucarística fue en honor a los hermanos difuntos de nuestra Hermandad. El coro parroquial de San Paulino fue el encargado de amenizar la celebración durante los tres días de Triduo.
La Santa Misa estuvo
auxiliada en todo momento por nuestro Cuerpo de Acólitos de la Cofradía de la
Borriquita de Chiclana de la Fra., a la cual le estamos siempre agradecidos por
prestarnos su apoyo y mostrar su compromiso con nosotros. Otro lazo de unión
que mantiene a la ciudad de Chiclana y Barbate unidas por el mundo cofrade.
El Padre Tomás, en su homilía, nos pedía que al besar el pie a Nuestro
Señor de Medinaceli, lo miráramos a los ojos, y viésemos la ternura que
transmite, que miráramos a sus manos cautivas, que están atadas por ayudar al
necesitado, curar al enfermo y dar de comer al hambriento.
Una vez finalizada la
homilía, el Sacerdote llamó al altar a nuestro Secretario y a nuestro Hermano
Mayor, quienes junto al libro de reglas acudieron al Altar Mayor para realizar la
Solemne Protestación de Fe. Nuestro Secretario llamo a los miembros de nuestra
Junta de Gobierno y se colocaron en semicírculo frente al Altar, mientras
nuestro Hermano Mayor dio lectura al ritual.
En el momento del
Ofertorio, junto con el Pan y el Vino se hizo entrega de la antigua corona de
salida que portaba Nuestra Señora de la Trinidad, y que ha sido restaurada en
el taller hispalense de José María Bernet, los gastos de la restauración ha
sido sufragados por un hermano de nuestra Corporación Nazarena. La corona fue
bendecida por el Padre Tomás.
Tras la Comunión, la
Hermana Mayor de la Lasaliana Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Jesucristo
Rey en su Entrada Triunfal en Jerusalén, Santo Crucifijo de la Salud, Nuestra
Señora de la Estrella y San Juan Bautista de la Salle de Chiclana de la Fra. le
pidió a nuestro Hermano Mayor que le acompañara al Altar para realizar lectura
de un documento. Una vez en el ambón, Ángela Inmaculada Parra Sánchez dio
lectura al acta de la reunión de su Junta de Gobierno del pasado 21 de Enero,
donde acordaban por mayoría absoluta hacernos entrega de la Insignia de Oro de
su Hermandad por el trato recibido durante los diez años que cumplirán los
cuerpos de acolito acompañando a nuestros Titulares. Una vez recibida tal digna
insignia y un cuadro con la copia del acta de ese acuerdo, nuestro Hermano
Mayor intervino agradeciendo el gestó, aunque comentaba que quien verdaderamente
están agradecidos y orgullosos era nuestra hermandad de ellos, ya que cada año
acuden acompañar a nuestros Titulares de una forma ejemplar, acudiendo a
nuestra llamada siempre que lo requerimos de forma desinteresada,
encontrándonos como en casa en todas las visitas que realizamos a Chiclana
durante el año. Tal insignia la portará Nuestra Señora de la Trinidad nuestra
salida procesional. Reiteramos nuestro agradecimiento a la Hermandad hermana de
la Borriquita de Chiclana y deseando que esta buena relación de hermanamiento
que felizmente vivimos en la actualidad perdure por mucho tiempo y que los diez
años que llevan acompañándonos sea solo el principio.
Después de la incensación
de Nuestros Titulares y realizar las Oraciones, se procedió al Solemne Besapie
a la Milagrosa Imagen de Nuestro Titular Jesús de Medinaceli.
La penumbra inundo el
sagrado templo para trasladarnos a un clima de austeridad y recogimiento,
escoltado por cuatro acólitos con ciriales un Señorial Cristo de Medinaceli
quedaba expuesto en Solemne Besapies,
acompañado por los sones de un trio de capilla musical más de 500
feligreses y devotos besaban el pie del Señor de Barbate.
Edita: La Junta de Gobierno
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